Relato: Incluso las estrellas mueren

Hacía ya mucho tiempo desde la última vez que subí un relato mío al blog. Vale, he publicado la Baraja de Microrelatos y completé Sub-Suelo.

Pero yo ya echaba de menos enseñaros una de mis historias cortas, así que os traigo un relato que escribí la noche del domingo 27 de noviembre poco antes de irme a dormir.

Espero que sea de vuestro gusto ^^

Incluso las estrellas mueren

Pequeña Dama no podía dormir aquella noche. Con pasitos suaves, se deslizó por las baldosas de la gran mansión hasta llegar a la sala de la chimenea.

Aunque era tarde, su hermana seguía allí, despierta, acomodada en la butaca con un libro sobre el regazo. Al oírla llegar la saludó con una sonrisa.

—¿Qué ocurre?  —le preguntó cerrando el libro.

—No puedo dormirme —confesó Pequeña Dama—. Le echo de menos.

Su hermana, dejando el libro sobre la mesita, extendió los brazos hacia ella y la hizo sentarse en su regazo, ante las llamas.

—No es justo —murmuró la niña—. ¿Por qué tuvo que morir?

—Padre decía siempre que todo lo que existe tiene un día para morir—explicó su hermana.

La voz se le quebraba al hablar, y Pequeña Dama podía sentir los temblores que sacudían los hombros de su hermana mayor.

—Todo. Incluso las estrellas mueren—prosiguió la joven, meciendo a Pequeña Dama—. Pero padre también decía que esto no debe entristecernos, sino que debemos estar contentos de haberlas visto brillar.

Pequeña Dama cerró los ojos, conteniendo dentro las lágrimas. Poco a poco, el calor del fuego y el abrazo de su hermana lograron arrojarla en brazos de Morfeo, y esa noche, Pequeña Dama soñó con las estrellas.

Su hermana aún permaneció despierta un rato más junto a las llamas del hogar, que ya empezaba a extinguirse, disfrutando una noche más del brillo de las estrellas que se colaba por la ventana.

Un poco triste, lo reconozco. Espero que su aire melancólico no haya impedido que os agrade. Como siempre, sois libres de dejar vuestras opiniones y sugerencias en los comentarios.

¡Nos leemos! ^^