Escribir personajes realistas nunca es fácil. De hecho, elaborar personajes no es nunca un trabajo sencillo. Ni siquiera si has creado antes una buena ficha.
Para ayudarnos a conectar y conocer a nuestra criaturas existen muchas técnicas. Unas de las más recientes es someterlos a la intensa entrevista propuesta por Javier Miró.
Sin embargo, hay momentos en que ninguna técnica funciona. Y ese personaje que te hablaba con tanta fluidez se queda de repente mudo y silencioso. ¿Qué hacer cuando ocurre esto?
Pues aplicar el refranero: si la montaña no va a Mahoma, Mahoma irá a la montaña.
O dicho de otra manera. Si tu personaje se niega a hablar contigo tendrás que ser tú quien vaya a buscarle. Te tocará trabajar un personaje desde el terreno.
A continuación os explico cómo carallo se hace eso con un caso práctico. ¿Os apetece daros una vuelta por el Norte de España? Pues id a por papel y lápiz, que nos vamos ^^
¿Qué es trabajar un personaje desde el terreno?
Esta técnica consiste en construir un personaje o profundizar en él a partir de su entorno. Funciona especialmente bien con personajes que ya tienen cierto recorrido o en los que hemos trabajado durante un tiempo.
Sin embargo, no hay ningún impedimento en aplicar este método para nuevas creaciones. Simplemente, en lugar de trabajar el personaje, lo construiremos.
Para poder aplicarla adecuadamente debemos embebernos en el espacio donde se desarrolla y/o habita el personaje: su país, su ciudad, su morada...
El objetivo de este sistema es impregnarnos nuevamente de la esencia de nuestro personaje. Esto nos permitirá comprenderle en profundidad, empaparnos de su personalidad y poder trazar mejor sus acciones dentro de la trama de nuestra historia.
La mejor forma de trabajar desde el terreno un personaje es viajando a la localización. No obstante, no es la única manera que existe de aplicar este sistema.
Más abajo os he dejado una lista de opciones, pero de momento vamos a desarrollar el método paso a paso, puesto que se aplica de igual modo.
Caso práctico: tras los pasos de Aker
Antes de entrar de pleno en faena conviene dar un poquito de contexto sobre el ejemplo sobre el que vamos a trabajar.
El personaje con el que apliqué este sistema es Aker, uno de los integrantes del trío protagonista de Sorgina. Y si tengo que fiarme de las reseñas hasta el momento, también el personaje más escurridizo y enigmático de la novela.
Tranquilos, este es un artículo sin spoilers. De modo que podéis leerlo sin miedo a que os destripe ningún detalle importante sobre la trama ^^
Como ya expliqué en la entrevista que me hizo Aritz P. Berra, esta novela tiene prevista una continuación. Eso quería decir que debía seguir trabajando con los personajes.
En el caso de Paloma esto resultaba sencillo. Se trata de una mujer muy empática y con unas prioridades clara. ¿Pero qué pasa con Aker?
Pues pasó que (para no variar) decidió no hacer ni puto caso y negarse a decirme hacia dónde lo conducirían sus pasos. Ante tamaña terquedad no me quedó más remedio que perseguirlo hasta la mismísima puerta de su casa.
Paso 1: conociendo el terreno
Cuando uno se muda a un barrio nuevo, lo suyo es explorar el entorno para saber dónde comprar el pan, en qué bares está más rica la cerveza y a qué distancia estamos del transporte público y otros servicios.
En el caso del ambiente de los personajes sucede lo mismo. Hay que hacer una radiografía del terreno para hacernos una idea de en qué espacios se mueve nuestra creación.
Por eso es importante viajar, porque permite la exploración palmo a palmo. Y porque como dice mi admirado sensei: viajar enriquece y abre la mente.
Así pues, con el fin de conocer mejor el hogar de Aker, me desplacé hasta la idílica localidad de Zugarramurdi. Una población que vive en territorio de frontera con Francia y es tristemente conocida por el monstruoso proceso de brujería que la asoló en 1610.
Paso 2: localizaciones concretas
Pero conocer el entorno genéricamente no basta. Saber que una persona reside en Francia no te ayuda a entender cómo es su casa o sus costumbres. Es necesario acotar algo más este marco.
Para ello, conviene documentarse sobre los puntos clave que nuestro personaje frecuenta y conoce. Por ejemplo, el barrio en el que vive, el teatro donde trabaja o el garito donde se va a tomar la última con sus amigos.
En el caso de Aker esto resultó bastante sencillo. Su enclave predilecto de Zugarramurdi son las cuevas de la misma localidad, donde según cuentan tenían lugar los aquelarres de brujas.
Son estas un conjunto de cavidades de gran altura y extrañas formas. El paraje ideal para que los contrabandistas escondieran sus materiales. Y para que los vecinos desatasen su imaginación acerca de infernales reuniones.
Así pues, bastó con estar un ratito sentado en la cueva, oyendo el eco de la Regata del Infierno resonando en la cavidad, para entrar en conexión con Aker.
La visita me ayudó a comprender parte de su carácter y también a hacerme una idea de cómo debió ser su vida en Zugarramurdi junto al aquelarre.
Esto, junto con el paseo por el pueblo me hizo entender de un modo más firme a mi personaje y su realidad cotidiana. Porque no es lo mismo leer sobre un lugar que verlo, tocarlo, oírlo y olerlo.
Percibir algo con los sentidos hace que seas más preciso al describirlo en tus historias. Y eso contribuye no solo al enriquecimiento de nuestro personajes, sino también a mejorar en el worldbuilding.
Desgraciadamente, aunque las vistas y el entorno resultan preciosos, no fui capaz de encontrar al puñetero de mi personaje en esos parajes.
Al parecer, después de iniciar su tour con Paloma le ha cogido gusto a hacer turismo. Así que no tuve más remedio que prestarme a métodos más expeditivos u_u
Paso 3: Documentación indirecta
Cuando el trabajo sobre el terreno no es suficiente o el viaje no es factible existen otras vías para profundizar en nuestro personaje y su entorno.
Esto resulta muy útil cuando queremos indagar en un escenario del pasado o cuando trabajamos en un espacio inventado dentro de nuestro mundo existente.
Visitar museos y archivos nos puede aportar datos extra que no encontramos sobre el terreno. Ver documentales o leer guías de viaje también pueden ser una opción para trabajar a nuestros personajes a través de su entorno.
Así pues, con el fin de informarme mejor sobre cómo era Zugarramurdi en el siglo XVII, momento en que se ambienta Sorgina, me encaminé al museo de la localidad.
He de decir que es una visita que recomiendo si tenéis la oportunidad. Entre otras cosas, porque el museo se asienta en el antiguo hospital de Zugarramurdi y han conservado bastante bien sus interiores.
Ya de entrada, el edificio en sí me ayudó a mejorar mis nociones de arquitectura norteña ^^
El interior del museo está dedicado no solo al Auto de Fe de Logroño en el que perecieron numerosos vecinos de la localidad. También trata sobre qué es la brujería, cuál fue su impacto en Europa y cómo se vivía en territorio vasco en el siglo XVII.
Suficientes datos para entender la realidad vivida por Aker y Paloma. Y también para hacerme con una idea aún más clara de cómo debió vivirse en esa tierra durante la Edad Moderna.
Visitar cualquier museo o exposición relacionada con la ambientación de vuestra novela o con el contexto e intereses de vuestros personajes dará un resultado similar.
No solo obtendréis datos adicionales a lo que puede hallarse por internet, sino que os empaparéis con vuestras propias impresiones al respecto. Eso os ayudará a entender cómo percibe y vive vuestro personaje.
Siguiendo con estos pasos no solo construiréis personajes bien integrados en su entorno, sino también escenarios más sólidos y ricos por los cuales moverlos.
Y por si os lo estáis preguntando, lo cierto es que finalmente no logré dar con Aker en Zugarramurdi. La buena noticia es que en breve pero intenso periplo por el Norte sí tuve la oportunidad de cruzármelo.
Pero el escenario donde esto sucedió quedará en suspense hasta que la continuación de Sorgina vea la luz. Mientras os dejo la imagen de arriba para que especuléis al respecto.
¡Nos leemos! ^^
A continuación os explico cómo carallo se hace eso con un caso práctico. ¿Os apetece daros una vuelta por el Norte de España? Pues id a por papel y lápiz, que nos vamos ^^
¿Qué es trabajar un personaje desde el terreno?
Esta técnica consiste en construir un personaje o profundizar en él a partir de su entorno. Funciona especialmente bien con personajes que ya tienen cierto recorrido o en los que hemos trabajado durante un tiempo.
Sin embargo, no hay ningún impedimento en aplicar este método para nuevas creaciones. Simplemente, en lugar de trabajar el personaje, lo construiremos.
Para poder aplicarla adecuadamente debemos embebernos en el espacio donde se desarrolla y/o habita el personaje: su país, su ciudad, su morada...
El objetivo de este sistema es impregnarnos nuevamente de la esencia de nuestro personaje. Esto nos permitirá comprenderle en profundidad, empaparnos de su personalidad y poder trazar mejor sus acciones dentro de la trama de nuestra historia.
La mejor forma de trabajar desde el terreno un personaje es viajando a la localización. No obstante, no es la única manera que existe de aplicar este sistema.
Más abajo os he dejado una lista de opciones, pero de momento vamos a desarrollar el método paso a paso, puesto que se aplica de igual modo.
Caso práctico: tras los pasos de Aker
Antes de entrar de pleno en faena conviene dar un poquito de contexto sobre el ejemplo sobre el que vamos a trabajar.
El personaje con el que apliqué este sistema es Aker, uno de los integrantes del trío protagonista de Sorgina. Y si tengo que fiarme de las reseñas hasta el momento, también el personaje más escurridizo y enigmático de la novela.
Tranquilos, este es un artículo sin spoilers. De modo que podéis leerlo sin miedo a que os destripe ningún detalle importante sobre la trama ^^
Como ya expliqué en la entrevista que me hizo Aritz P. Berra, esta novela tiene prevista una continuación. Eso quería decir que debía seguir trabajando con los personajes.
En el caso de Paloma esto resultaba sencillo. Se trata de una mujer muy empática y con unas prioridades clara. ¿Pero qué pasa con Aker?
Pues pasó que (para no variar) decidió no hacer ni puto caso y negarse a decirme hacia dónde lo conducirían sus pasos. Ante tamaña terquedad no me quedó más remedio que perseguirlo hasta la mismísima puerta de su casa.
Paso 1: conociendo el terreno
Cuando uno se muda a un barrio nuevo, lo suyo es explorar el entorno para saber dónde comprar el pan, en qué bares está más rica la cerveza y a qué distancia estamos del transporte público y otros servicios.
En el caso del ambiente de los personajes sucede lo mismo. Hay que hacer una radiografía del terreno para hacernos una idea de en qué espacios se mueve nuestra creación.
Por eso es importante viajar, porque permite la exploración palmo a palmo. Y porque como dice mi admirado sensei: viajar enriquece y abre la mente.
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| Panorámica de Zugarramurdi desde el mirador de la Cueva © Alister Mairon |
Así pues, con el fin de conocer mejor el hogar de Aker, me desplacé hasta la idílica localidad de Zugarramurdi. Una población que vive en territorio de frontera con Francia y es tristemente conocida por el monstruoso proceso de brujería que la asoló en 1610.
Paso 2: localizaciones concretas
Pero conocer el entorno genéricamente no basta. Saber que una persona reside en Francia no te ayuda a entender cómo es su casa o sus costumbres. Es necesario acotar algo más este marco.
Para ello, conviene documentarse sobre los puntos clave que nuestro personaje frecuenta y conoce. Por ejemplo, el barrio en el que vive, el teatro donde trabaja o el garito donde se va a tomar la última con sus amigos.
En el caso de Aker esto resultó bastante sencillo. Su enclave predilecto de Zugarramurdi son las cuevas de la misma localidad, donde según cuentan tenían lugar los aquelarres de brujas.
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| Vistas desde la Cueva del Aquelarre (vaya paisaje tiene Aker en casa) © Alister Mairon |
Son estas un conjunto de cavidades de gran altura y extrañas formas. El paraje ideal para que los contrabandistas escondieran sus materiales. Y para que los vecinos desatasen su imaginación acerca de infernales reuniones.
Así pues, bastó con estar un ratito sentado en la cueva, oyendo el eco de la Regata del Infierno resonando en la cavidad, para entrar en conexión con Aker.
La visita me ayudó a comprender parte de su carácter y también a hacerme una idea de cómo debió ser su vida en Zugarramurdi junto al aquelarre.
Esto, junto con el paseo por el pueblo me hizo entender de un modo más firme a mi personaje y su realidad cotidiana. Porque no es lo mismo leer sobre un lugar que verlo, tocarlo, oírlo y olerlo.
Percibir algo con los sentidos hace que seas más preciso al describirlo en tus historias. Y eso contribuye no solo al enriquecimiento de nuestro personajes, sino también a mejorar en el worldbuilding.
Desgraciadamente, aunque las vistas y el entorno resultan preciosos, no fui capaz de encontrar al puñetero de mi personaje en esos parajes.
Al parecer, después de iniciar su tour con Paloma le ha cogido gusto a hacer turismo. Así que no tuve más remedio que prestarme a métodos más expeditivos u_u
Paso 3: Documentación indirecta
Cuando el trabajo sobre el terreno no es suficiente o el viaje no es factible existen otras vías para profundizar en nuestro personaje y su entorno.
Esto resulta muy útil cuando queremos indagar en un escenario del pasado o cuando trabajamos en un espacio inventado dentro de nuestro mundo existente.
Visitar museos y archivos nos puede aportar datos extra que no encontramos sobre el terreno. Ver documentales o leer guías de viaje también pueden ser una opción para trabajar a nuestros personajes a través de su entorno.
Así pues, con el fin de informarme mejor sobre cómo era Zugarramurdi en el siglo XVII, momento en que se ambienta Sorgina, me encaminé al museo de la localidad.
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| Entrada al Museo de las Brujas © Alister Mairon |
He de decir que es una visita que recomiendo si tenéis la oportunidad. Entre otras cosas, porque el museo se asienta en el antiguo hospital de Zugarramurdi y han conservado bastante bien sus interiores.
Ya de entrada, el edificio en sí me ayudó a mejorar mis nociones de arquitectura norteña ^^
El interior del museo está dedicado no solo al Auto de Fe de Logroño en el que perecieron numerosos vecinos de la localidad. También trata sobre qué es la brujería, cuál fue su impacto en Europa y cómo se vivía en territorio vasco en el siglo XVII.
Suficientes datos para entender la realidad vivida por Aker y Paloma. Y también para hacerme con una idea aún más clara de cómo debió vivirse en esa tierra durante la Edad Moderna.
Visitar cualquier museo o exposición relacionada con la ambientación de vuestra novela o con el contexto e intereses de vuestros personajes dará un resultado similar.
No solo obtendréis datos adicionales a lo que puede hallarse por internet, sino que os empaparéis con vuestras propias impresiones al respecto. Eso os ayudará a entender cómo percibe y vive vuestro personaje.
Siguiendo con estos pasos no solo construiréis personajes bien integrados en su entorno, sino también escenarios más sólidos y ricos por los cuales moverlos.
Y por si os lo estáis preguntando, lo cierto es que finalmente no logré dar con Aker en Zugarramurdi. La buena noticia es que en breve pero intenso periplo por el Norte sí tuve la oportunidad de cruzármelo.
Pero el escenario donde esto sucedió quedará en suspense hasta que la continuación de Sorgina vea la luz. Mientras os dejo la imagen de arriba para que especuléis al respecto.
¡Nos leemos! ^^
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